Sobre Planilandia. De 1884 a hoy.

Anoche acabé de leer el libro de Planilandia de E. Abbott y de ver la película homónima de 2007 y, claro, no podía resistirme a escribir un post sobre ello.

¿De qué trata el libro? Como podéis ver en las imágenes , trata de dimensiones, de interdimensionalidad, de planos, de formas, de movimiento, de viajes, de física, de metafísica, de transformar la mirada... Pero no corramos, situémonos  un poco y vayamos al meollo.
Cuadrado A hablando con su sobrino Hex sobre las 3D
Planilandia es un mundo plano donde todos los personajes (triángulos, cuadrados, hexágonos...) se mueven en dos direcciones del espacio. En este mundillo surge un incrédulo cuadrado que cree que hay algo más allá de su percepción, que cree en un “arriba y abajo” y no en un mero “Norte- Sur”;  que cree que hay una realidad más allá de la que ve que ni él mismo puede comprender, pero sí intuir. Consciente de sus limitaciones busca comprender el misterio que le rodea y del que sólo puede ver una minúscula parte. La película, aunque cutre y mareante,  ayuda a representarnos el mundo de Planilandia de una manera que quizá el texto no consiga llegar a mostrar, incluso  con los dibujos del propio novelista que intenta, por todos sus medios, explicarse de la mejor manera.

Esfera y Cuadrado A hablando sobre la interdimensionalidad
La novela comienza con unas consideraciones muy interesantes sobre el mundo en 2D que, aunque innecesarias en gran medida para comprender el desarrollo de la acción, consigue que el lector se posicione y comprenda el complicado mundo de los planos. Así, se nos dirá que  las figuras solo pueden verse de lado (sólo pueden ver líneas que se acercan y se alejan), sólo pueden identificarse tocándose, para comprobar el número de lados e identificar al vecino, que necesitan moverse constantemente para evitar dañar con sus ángulos a los demás...

Esa primera parte, que constituye una descripción del mundo de Planilandia, ocupará una parte importante de esta novelita, y sirve para preparar el terreno para la novela propiamente dicha. La segunda parte narrará las aventuras de un cuadrado insaciable y curioso por vocación (Cuadrado A), que no se conforma con lo que ve, con lo que le cuentan, con lo que vive en Planilandia. Un cuadrado que quiere más,que  quiere alcanzar el infinito aunque lo tomen por loco. Viajará en sueños al mundo de primera dimensión y desde allí empezará a plantearse su propia existencia y su papel en el mundo. El texto está lleno de diálogos maravillosos, especialmente cuando el protagonista se enfrenta a habitantes de otras dimensiones.
La curiosidad de este personaje que sale de sí mismo, que transforma su mirada, que rompe las barreras que su propio pensamiento le impone;  hace que su horizonte se ensanche y se busque en el otro, aunque, para él también sea incomprensible.
Las 2D y las 3D

Es cierto que la novela tiene ya sus añitos (es de 1884) pero no por ello deja de ser actual. También es cierto que la idea de cuarta dimensión que se maneja está obsoleta- lo sabemos gracias a la relatividad y otros avances-  pero es un atisbo de lo que estaba por llegar con las revoluciones científicas del siglo XX.  Poder leer el texto de un autor polifacético, sobre un soñador empedernido, a las puertas de esta revolución científica, constituye un aliciente para acercarse a la novela.

Es es uno de los alicientes, pero hay muchísimos más. Se pueden hacer lecturas en clave metafísica, matemática, física, psicológica, etc. pero cada cual tiene que encontrarse con las suyas y dejarse llevar a las dimensiones desconocidas, en un texto que es raro y apasionante a partes iguales. Quién sabe, quizá se encuentre con este simple y atareado cuadrado en su viaje interdimensional.


El título del blog hace alusión a la difusión, visionado y amor por las imágenes. Reflexionaremos sobre las imágenes, sobre películas, sobre el género (audio)visual en general.
Exposiciones, comentarios, críticas, reflexiones, aportaciones, decisiones... llenarán cada rincón de Icon-o-rama.